ESTUDIAR EN CANADÁ EN PERIODO DE PANDEMIA
Estudiar en un país extranjero es ya una experiencia, pero si además nos toca hacerlo en periodo de pandemia la intensidad se multiplica. Muchos de nuestros alumnos se encontraron ante esta situación, y el dilema al que se enfrentaban era regresar o no a sus hogares. La gran mayoría decidieron quedarse en Canadá y alargar al máximo su estancia en el país. ¿Y por qué decidieron quedarse en el extranjero? La respuesta es sencilla, porque ninguno de ellos renunció a sus sueños.
Canadá es uno de los países más desarrollados a nivel internacional. Su sistema educativo está preparado para la formación online de sus alumnos, y a menudo es la forma de trabajo habitual. Los estudiantes realizan una gran cantidad de trabajos de manera telemática, y el estudio se organiza de forma que las clases presenciales y las tecnologías estén integradas en los currículos escolares.
El Covid-19 nos ha afectado de forma diferente según países, y desgraciadamente, España ha sido uno de los más vulnerables. Sin embrago Canadá es uno de los países con menos enfermos por coronavirus del mundo. Nuestros alumnos han visto con preocupación la situación por la que pasaban sus familiares en España, e incluso han compartido sentimientos con sus compañeros de familia de otras nacionalidades, sobre todo estudiantes chinos e italianos. Entre ellos se han apoyado y se han hecho fuertes, mandando mensajes de tranquilidad y esperanza a sus seres queridos. Nuestros chicos se sentían seguros en sus hogares, y sus padres desde España también.
Estando confinados, todos ellos han seguido estudiando, y han participado más que nunca de las tradiciones y costumbres familiares. Han jugado a juegos típicos del país, han cocinado platos tradicionales, han visto mucho cine en inglés, y sobre todo, han forjado lazos muy estrechos con sus familias de acogida. Además, el confinamiento allí fue más relajado que en España, y los paseos al aire libre o la práctica de algún deporte era algo habitual en su día a día.
La semana pasada una televisión aragonesa entrevistó a una de nuestras alumnas, Mónica, para saber cómo era la vida de los estudiantes españoles en el extranjero. Mónica comentó que ella nunca había perdido la ilusión, que aún espera volver a ver su colegio y despedirse de profesores y compañeros como se merecen. Ese reencuentro es lo que la retuvo en Canadá, el sueño de seguir aprendiendo, de seguir creciendo y disfrutando junto a aquellas personas que se habían convertido en su familia en los últimos nueve meses.
Nadie nos prepara ante las adversidades de la vida, y nos es imposible calcular todos los riesgos a los que nos enfrentaremos. Ante la situación actual todos hemos crecido. Por nuestra parte hemos trabajado duro para estar preparados ante otra posible pandemia, cambiando nuestra política de cancelación y buscando las mejores aseguradoras. Países, embajadas, aerolíneas e instituciones sanitarias y educativas también están elaborando nuevos protocolos de actuación para asegurar el bienestar del ciudadano. Ahora solo queda poner de nuestra parte y no abandonar nuestros sueños. Lo peor ya lo hemos pasado, lo bueno está por llegar, depende de nosotros conseguirlo.
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